Por Gerardo Szalkowicz: Defender a Venezuela, en palabras y en acción
Enviado por Barometro
Internacional el sábado, 21 marzo, 2015 a las 16:30
Etiquetas: América
Latina está jugando su destino en Venezuela. Si Venezuela cae
venezuela
barometro
bi
vicepresidente
uruguayo Raúl Sendic América
Latina ha perdido.
La
orden ejecutiva de Obama que declara a Venezuela “una inusual y
extraordinaria amenaza a la Seguridad Nacional y a la política
exterior de los Estados Unidos” marca el punto más alto en la
escalada de la Casa Blanca por aniquilar el proceso bolivariano.
El
decreto, que declara a su país en “emergencia nacional”, sigue
el mismo libreto que en la previa a las incursiones militares en
Irak y Libia. Si bien suena improbable una invasión convencional en
suelo venezolano, Obama parece tantear el terreno para avanzar en un
eventual bloqueo económico y en una futura acción directa
“tercerizada” mediante una mayor penetración paramilitar.
¿Por
qué Venezuela escaló a lo más alto del podio de enemigos de
Washington? La voracidad norteamericana por la mayor reserva de
petróleo del mundo es una explicación que se queda corta.
Venezuela es, sin duda, la punta de lanza del cambio de época que
vive América Latina. Desde allí se marcó el camino para la
irrupción de un variopinto de gobiernos que decidieron dejar atrás
la tutela del Norte y pasar la página neoliberal, mientras los
pueblos presionaban en las calles para ese cambio. Desde Caracas se
irradió el rescate del ideario latinoamericanista de Simón
Bolívar, José Martí y tantos otros y otras. Con Hugo Chávez como
principal motor, germinaron una batería de proyectos de integración
como la Celac, el ALBA, Unasur, el Banco del Sur, Petrocaribe y
Telesur, que debilitaron la hegemonía estadounidense.
La
principal amenaza para EEUU es el ejemplo de Venezuela. Es el
peligro de que siga contagiando su impronta antimperialista. Es el
miedo al fantasma que recorre el continente: el fantasma del
socialismo bolivariano.
Lo
central de este nuevo escenario entonces es la explícita amenaza de
la potencia en decadencia hacia toda la región, como lo vienen
denunciando diversos analistas y líderes políticos. El
vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, lo sintetizó con
elogiable claridad: “América Latina está jugando su destino en
Venezuela. Si Venezuela cae, América Latina ha perdido. Venezuela
es la llave de América Latina, fue el inicio y no debe ser el punto
de inicio del fin”.
Las
reacciones en la región vienen siendo dispares: algunos gobiernos,
con Cuba, Bolivia y Ecuador y los demás países del ALBA a la
cabeza, han repudiado con fuerza la arremetida norteamericana. El
comunicado argentino también marcó un posicionamiento claro,
mientras que muchos han optado por el silencio (incluso Brasil) y
otros han derrapado, como el vicepresidente uruguayo Raúl Sendic.
La reunión en Caracas de los cancilleres de Unasur y su posterior
declaración -en la que se afirma que el decreto de Obama
“constituye una amenaza injerencista”- es un dato alentador.
También,
como en cada coyuntura crítica, los movimientos populares
realizaron en los últimos días actos y marchas a favor de
Venezuela. Las muestras de apoyo se replicaron en más de una decena
de países.
El
desenlace de esta batalla será clave para el futuro de América
Latina. Es momento de cerrar filas con Venezuela, sin medias tintas.
De valorar todo lo que le dio a la región en los últimos 16 años.
La defensa de la democracia venezolana se convierte en una
obligación para todas y todos los que -más allá de posiciones
políticas e ideológicas- nos sentimos latinoamericanos. Es tiempo
de alzar fuerte la voz y, sobre todo, de pasar a la acción.
entoncesque666@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario